MANDARIN ORIENTAL MIAMI
Su nombre nos remite a lo fresco y acogedor del mundo oriental. Ninguna paradoja viniendo de un recinto calificado, por dos años consecutivos, como Triple Five-Star por Forbes Travel Guide, prometiendo ser el mejor hotel de Miami, Florida.
Con el sabor de lujo refinado de la exótica Asia que representa, Mandarin Oriental es un refugio de tranquilidad rodeado por la vista –y la brisa – del mar.
Su localización en Brickell Key es perfecta pues, así como la figura de una cítrico entero (círculo cerrado); Mandarin Oriental se localiza en una privada parcela de tierra, como una isla privada y aparatada, rodeada de atractivas vistas al agua pero, a su vez, cerca de los destinos más populares de Miami como: South Beach, Downtown, Wynwood Arts District, Design District y Coconut Grove.
Cuando pensamos en Asia –y en la mandarina –, el color naranja no falta, y éste, en diferentes tonos, es el que dibuja el diseño contemporáneo de este exclusivo recinto. Un tono que brota también en las 326 elegantes habitaciones y suites, cada una con espectaculares vistas, ya sea de la bahía, de la playa privada del hotel o de la ciudad de Miami.
El alivio del cítrico y la espiritualidad del mundo asiático, nos llevan al galardonado Spa de 15,000 pies cuadrados, repartidos en tres niveles. Al entrar al Spa, recordamos que en la cultura asiática se cree que el hombre puede transformarse por medio del yoga pues, como respuesta, el Spa de Mandarin Oriental ofrece múltiples opciones para mejorar la mente, el cuerpo y el espíritu; desde los inigualables tratamientos terapéuticos propios del spa, hasta clases de Yoga, Pilates y Tai Chi. Cabe mencionar que, en uno de los tres pisos, se encuentra un Fitness Center completamente equipado así como entrenadores personales.
Éste, es un santuario que adopta un enfoque distinto a la experiencia tradicional de spa: ofrece una serie de tratamientos innovadores y restauradores, inspirados en los elementos de la naturaleza y las tradiciones antiguas de China, Ayurvédica, europea, balinesa y tailandesa. Cuenta con 11 salas privadas de tratamiento, cada una con texturas como el bambú, papel de arroz, vidrio y ropa natural de cama, que logran un diseño armonioso y equilibrado. También, en la planta superior, se encuentran seis impresionantes suites donde se obtiene la mejor experiencia Spa.
Como prueba de que estos tres pisos de relajamiento realmente valen la pena, el Spa, con reconocimiento Five-Star, estrena una serie de Wellness Retreats. Cada uno de ellos incluye: alojamiento de lujo por dos noches, desayuno saludable, almuerzo servido junto a la piscina, clase de gimnasia de una hora, consejos nutricionales y cuatro horas de tratamientos personalizados.
Del mismo modo que una mandarina tiene varios gajos, los huéspedes pueden elegir entre seis distintos temas para su retiro, cada uno enfocado a una materia específica de salud: Relax, Strengthen (Fuerza), Ground (Suelo, para paz interna y balance psicológico), Uplift (Levatamiento, ayuda a encontrar balance entre mente y cuerpo), Exotic (Enfocado en las raíces orientales, con un auténtico masaje Thai) y Beautify (Inspirado por los resultados de los tratamientos y productos Beauty by Mandarin Oriental).
Al pensar en una fruta como la mandarina es muy fácil que se nos haga agua la boca, pero cuando pensamos en el Mandarin Oriental, sucede lo mismo pero multiplicado por dos; no solo por el designio Oriental –todos sabemos que el sazón oriental es distinto y delicioso –; sino por los dos excelentes restaurantes que se resguardan en él.
El primero es La Mar by Gastón Acurio bajo el mandato del afamado chef peruano, considerado como “el embajador de la cocina Peruana”. Con éste restaurante, su tercero en Estados Unidos, Acurio continúa su impresionante legado, el cual ha hecho aparecer a sus varios restaurantes en las listas de Los Mejores del Mundo.
En La Mar, se puede disfrutar de estar frente al océano, tanto exterior como interiormente; así como de tres bares que proveen distintas experiencias culinarias. El Chef Ejecutivo Diego Oka, después de haber trabajado con Acurio durante más de una década, ofrece una mirada personal sobre la creación de auténticos platos peruanos, que van desde opciones novo-andinas a la fusión asiático-peruana, claro, sin dejar de lado el tradicional ceviche de mariscos. Oka, también cuenta con un nuevo menú de lanzamiento en el cual presenta pequeños platos de propuesta, tales como Nikei, Niguiri Peruano, varias opciones de Anticuchos Grill y Piqueos. Los platos principales de La Mar incluyen una selección de especialidades peruanas, así como arroz frito bajo el nombre de “Arroces”.
Su carta de cócteles no se queda atrás pues, La Mar by Gastón Acurio incluye una gran lista de los clásicos peruanos con bebidas preparadas con pisco –un aguardiente de uva de América del Sur –; así como cócteles icónicos con el característico twist peruano del restaurante.
¿Quién dijo que los colores azul y naranja no combinan? ¿Apoco nunca nadie ha visto una michelada con el cielo azul despejado por detrás? Precisamente, y como segundo ejemplo de la gran composición que hacen ambos tonos, el nombre del siguiente restaurante del Mandarin Oriental es Azul; un íntimo espacio con vistas a la Bahía de Biscayne y el horizonte de Miami.
Bajo el mandato del Chef William Crandall, éste lugar ofrece cocina contemporánea de fusión franco-asiática, tan impresionante como sus hermosas vistas. Su arquitectura se conforma de una cocina abierta, mármol blanco, ventanas de piso a techo y dramáticos armarios bodega; en los cuales se guardan más de 700 vinos de clase mundial. De igual modo, por si quedó el antojo de esa michelada, Bar Azul es perfecto para tomar una copa antes o después de la cena.
Ya si las ganas de un bar en forma son mayores, hay que visitar el MO Bar + Lounge el cual, hay que mencionar, como celebración de la segunda edición del MO Bar Unplugged, y en conjunto con Warner Music Latina, presentó conciertos íntimos de la dos veces nominada al premio Grammy, Rosana. Todo frente al mar.
No teniendo un concepto fantasioso sobre la imagen corporal, el hotel sigue fielmente la ideología oriental pues resalta su propia naturalidad en el sentido más armónico posible, logrando un espacio donde se siente y vive el lujo y la frescura de la exclusiva firma Mandarin Oriental.