Cuando hablamos de exclusividad también hay niveles y este es uno de los raros casos que existen en donde se produce un vehículo – solo uno – por una mezcla de nostalgia, tributo y que termina siendo el epítome de la exclusividad. Así es “La Voiture Noire”, cuya traducción literal es: “El auto negro”.

Su inspiración es el Type 57 de los 30’s, un hito que hace honor a otro hito. La inspiración de La voiture noire es nada más y nada menos que una de las más famosas creaciones de uno de los más reconocidos diseñadores e ingenieros que ha tenido la marca: Jean Bugatti (bautizado como Gianoberto Maria Carlo Bugatti) el hijo mayor de Ettore Bugatti, el cual no necesita presentación. Esta sinergia entre padre e hijo, la herencia familiar de la creatividad, así como la libertad para dejar fluir su conocimiento y su pasión automovilística en la fábrica que lleva su apellido hacen que la historia del Type 57 sea realmente única aunque tiene un lado triste y ese es que debido a un accidente Jean perdió la vida a los 30 años de edad.

La Voiture Noire representa también una gran celebración de los 110 años de la fundación de Bugatti que a su vez fue el pretexto para la creación de esta joya automovilística, y definitivamente no fue en vano. La consecuencia de esta conjunción de factores hizo su debut nada más y nada menos que durante el Geneva Motor Show de este 2019.

La Voiture Noire – el original de los años 30 – es una de las historias y enigmas más llamativos del mundo automovilístico, ya que es un auto que ha permanecido oculto – desaparecido – desde hace 80 años cuando debía de ser trasladado de Alsacia hacia Bordeaux cuando comenzó el éxodo francés durante la II Guerra Mundial.

Muchas de la información de esta nueva versión se mantiene en secrecía y eso aumenta aún más el interés de todos los fanáticos de esta marca o del automovilismo en general por conocer un poquito más sobre este espécimen tan raro.

El orgulloso propietario de este vehículo único provoca envidias para muchos de los coleccionistas automotrices del mundo – si no es que todos – ya que esta es una de esas rarezas que cada vez se ven menos en este planeta. Su base es el Chiron pero La Voiture Noire tiene un exterior totalmente distinto con reminiscencias de los vehículos del pasado y detalles estéticos que son un vivo recuerdo de los procesos de manufactura de antaño (como la línea central que divide en dos mitades perfectas este vehículo e inclusive la posición del limpiador ayuda para continuar dicha línea) son el tipo de cosas que lo distinguen pero además tienen un sentido histórico / de tributo.

Una joya automovilística que seguramente permanecerá resguardada en algún garaje celosamente custodiado y protegido de los ojos de ajenos para convertir a La Voiture Noire en una nueva versión del desaparecido Type 57 Atlante cuyo paradero será desconocido y las probabilidades de que jamás vuelva a ser visto en público nuevamente son muy altas – aunque esperemos que su paradero sea bien documentado y no tenga la suerte del vehículo al que hace tributo –.

Una pena que esta pieza única esté destinada a desaparecer de la vista del mundo y se convierta en un mito.