Sabores BELGAS


[gss ids=”3127,3128,3129,3130,3131,2686″ options=”timeout=4000″]

Por Jessica Servín Castillo

Ubicado en la región de Europa Occidental, y reconocido por la elaboración de sus excelentes cervezas, Bélgica se propone como un inigualable conquistador de paladares y nos presume su gastronomía basada en productos del mar y la tierra.

Llegamos justo a la hora de la comida y lo primero que hacemos es dirigirnos a la Taverne du Passage, un restaurante de estilo art decó, donde degustamos sus típicas croquetas de camarón y unos mejillones con papas fritas; obviamente acompañados por una cerveza. El mesero nos recomienda las de tipo “trapense”, llamadas así porque son cervezas de alta fermentación y producción limitada; ya que se elaboran dentro de abadías y por monjes. Probamos Achel y Westvelteren, mientras disfrutamos de la tarde en la terraza del restaurante. Desde ahí, recorremos con la vista la Torre del Ayuntamiento y toda la panorámica de la ciudad. Sí, este es el principio de las gratas sorpresas que la gastronomía belga nos tiene preparadas…. A continuación las rutas y restaurantes imperdibles.

Ruta de maltas

Una de las regiones más importantes en cuanto a la elaboración de cervezas en Bélgica es Valonia, donde se dice que existen más de 600 tipos diferentes. Otro factor que pone a esta ciudad entre las favoritas de los sibaritas, es su muy reconocida producción de chocolate, pues aquí se hacen los famosos: Galler, Neuhaus, Leonidas o el Edouard.

Pero regresemos al tema de la cerveza, ya que entre los más importantes lugares que debes visitar están: la Brasserie Cantillon, abierta por Paul Cantillon en 1900 y donde se hace cerveza tipo “rubia”; principalmente la Gueuze, la Faro y la Kriek. El siguiente punto es Brasserie Dubuisson, que funciona desde 1769 y donde se fabrican cervezas compuestas por ingredientes naturales. Ambas ofrecen recorridos guiados, donde se explica el proceso de elaboración y al final invitan a una extraordinaria cata de cerveza.

Algo que no debes dejar de visitar son las abadías –ya antes mencionadas –. En Bélgica hay sólo seis y valen la pena porque aquí las cervezas se preparan con criterios muy específicos; pues los monjes que participan en su elaboración únicamente pueden beber agua. La más famosa es la abadía de Chimay, donde también se hacen quesos, por lo que al final del recorrido recibirás una cata de cerveza y queso. Otra es la de Notre-Dame de Orval, que inició sus operaciones en 1900 y, para cerrar con broche de oro, qué mejor que visitar el Museo Schaerbeekois de la Cerveza o asistir a un curso en la escuela NovaBirra, donde aprenderás a hacer la tuya propia.

Tres restaurantes imperdibles

Según la Guía Michelin de Ciudades de Europa 2015, Bélgica es uno de los países de este continente que aún mantiene su tradición y prestigio como destino con restaurantes premiados. De hecho, este año han entrado a la lista: Da Mimmo, La Villa in The Sky, Le Monde est Petit y Le Passage de Bruxelles. También se incluye el Restaurante The Jane de Amberes. Pero eso no es todo, sino que además, Bélgica posee 140 restaurantes “Bib Gourmand”, que son los que la Guía define como “buena comida a precio moderado”.

The Jane de Amberes<h/3>

Lo que más llama la atención de este restaurante es su diseño, pues está dentro de una vieja iglesia. El menú fue creado por los chefs Sergio Herman y Nick Brill, quienes han colaborado en la transformación de este sitio. En cuanto a su carta, sobresalen los platillos elaborados con productos del mar y presentados artísticamente.

The Jane tiene capacidad para 60 personas, todas con vista a la cocina abierta. Hay lista de vinos, tanto de recién creación como clásicos y de grandes bodegas. Es necesario hacer reservación, por lo menos, con 24 horas de anticipación.

La Villa in The Sky

Otro con estrella, es este restaurante que conjuga la experiencia culinaria con su vertiginosa panorámica y vistas capaces de quitar el aliento a quien sea. Las creaciones gastronómicas pertenecen al chef de estrella Michelin Alexandre Dionisio, quien elabora un menú con productos frescos de temporada. La propuesta gastronómica es cocina clásica.

Hof van Cleve

El chef que está al frente de este castillo culinario es Peter Goossens quien, desde hace más de 20 años, es llamado el creador de la nueva cocina belga y que, además, ha recibido varios premios y galardones internacionales.

Su menú se basa en los mariscos que combinan con productos de su propia huerta. Sobresale su carta de vinos, aunque también cuenta con varias cervezas y licores. Si llegas a ir, debes ordenar el Calamar sobre puré con wasabe y, de postre, unos canelones de mago, queso fresco y sorbete de lichi.

Den y Aman

Cocina franco-belga a base de carne, pescado y mejillones, por ejemplo aquellos cocidos con apio, así como su típica anguila; estos dos últimos son opciones verdaderamente obligatorios. Entre sus platillos estrella está el “waterzoï”, un pescado de río que se guisa con verduras y, para cerrar, los rollitos de primavera con chocolate caliente y salsa de vainilla. Sus chefs, Den y Aman, son los propietarios y dueños de la muy bien merecida estrella Michelin.

CUADRO

La cerveza belga

Se comenzó a producir desde el siglo VII. Al día de hoy existen tres tipos:

1 Cerveza de baja fermentación. Tipo lager.

2 Cerveza de alta fermentación. Tipo ámbar o blanca; son las cervezas que se hacen en las abadías.

3 Cerveza de fermentación espontánea. Tipo afrutada y dulce.